Métodos de resinación: Breve estudio de cada sistema:

1. SISTEMA TRADICIONAL O HUGES:

Las operaciones que realiza el resinero se pueden reunir en 3 grupos.

a) La preparación del pino: se realiza en Marzo y parte de abril.
• Desroñe: Consiste en quitar la corteza de la zona donde se va a picar. Es importante no realizar heridas al pino, sino dejar una fina capa de corteza, de color rojo, llamada savia por los resineros. Se emplean para esta operación el “hacha” y el “barrasco”.
• Colocación de la grapa y el pote: La “grapa” es una placa fina de Zinc o hierro galvanizado que sirve para recoger la resina que escurre por la cara y llevarla al pote. Para colocarla se hace primero en el tronco una hendidura
con la “media luna” y allí se coloca. El “pote” es un recipiente con forma de maceta, pero sin agujero, están hechos de barro cocido o de plástico. Para sujetar el pote por debajo, se clava en el tronco una punta sin cabeza. Una vez colocadas la punta y la grapa se coloca entre ambas el pote, de modo que quede bien sujeto para que no se derrame la resina.

b) Pica: Es la operación que consiste en ir cortando en el tronco del pino, ya descortezado, parte de la corteza, el “felógeno” (capa generatriz de la corteza)el “líber” (capa generatriz del felógeno y el cambium) el “cambium” y parte de madera en lonchas muy finas llamadas “serojas”. Estas “serojas” un buen resinero, nos la saca de un solo corte sino, dando cortes consecutivos muy finos sin llegar a arrancarlas, lo que se hace al final del corte.
Las herramientas utilizadas son la “escoda”, “gubia” o “azuela”.
Al hacer esta herida, comienzan a aparecer gotas de resina, que van escurriendo por la cara, pero a los cinco o seis días de hacer la pica ya no produce resina, por lo que se debe proceder a refrescar este pica y subir un poco hacia arriba.
Un buen resinero debe dar unas 36 picas en la campaña para hacer la “entalladura”. La altura total de una cara (cinco entalladuras) será como máximo
de 3,40 m. (“melera” son 3,40 m. bajos del fuste) Entre cara y cara, debe quedar
una zona sin herir con una anchura como mínimo de 4 cm. denominada “repulgo”, que sirve para la cicatrización de las caras. Para poner en resinación un pino debe tener un diámetro normal con corteza, como mínimo de 30 cm.

c) Remasa o recogida de la miera: Al cabo de varias picas, el “pote” se va llenando de miera y es necesario recogerla para que no se caiga. El “remasador” (bien contratado o bien el propio resinero) vierte el contenido de los potes en una “lata” cuadrada con asa o con ruedas (“carretillo”) ayudado por la “paleta” o “cuchillo”. Una vez llenas las latas se vierte su contenido en unos barriles con una capacidad de más de 200 Kgs. denominados “cubas” y convenientemente repartidos por la mata. Generalmente se suelen hacer 6 a 8 remesas por campaña, realizando la primera a comienzos de mayo. La última remasa se llama “raedura” o “barrasco”, y en ésta el resinero después de recoger la miera del pote, rasea la entalladura para despegar la miera pegada, con una herramienta llamada “raedera” o “garrancha”, esta miera pegada (“barrasco”) se recoge en un trapo o hule colocado en la base del pino o sobre un trípode. La miera que se cae al suelo forma una masa que se conoce con el nombre de “sarro” y que se utilizaba para fabricar “pez”.





2. SISTEMA DE PICA DE CORTEZA CON ESTIMULANTES:


a) Preparación del tronco:
• El desroñe: Se hace en dos tiempos, primero se desbasta quitando parte de la corteza con el “hacha” o “barrasco” y después se iguala utilizando el “alisador” en la corteza que queda. En este sistema debe quedar más corteza que en el sistema Hugues, quitando con el “alisador” sólo hasta donde terminan las rajas de la corteza, procurando que no queden calvas, ya que si es así el ácido subirá e inutilizará esa zona para producir resina. Una vez derroñado se marcan las guías con el “trazador”, sirviendo estas señales para dar las picas.
• Colocación de la grapa y el pote: La “grapa” se coloca haciendo una incisión en el tronco utilizando una “media luna” de perfil redondeado para que profundice por igual. En esta incisión se coloca la “grapa” con una forma distinta a la del otro sistema (Hugues). Debe colocarse de manera que sobresalga unos dos cm. por cada
lado, por fuera de la entalladura.
La colocación del pote y la punta es idéntica a la del otro sistema.

b) Pica: La “escoda” o “azuela” utilizada en este sistema en completamente distinta que en el otro método. Para que funcione correctamente, las alas laterales deben estar bien afiladas, más que la cara central. Para dar buena salida a las “virutas”, el asiento debe estar de tal modo que forme un ángulo de unos 5º, con la dirección del mango. Antes de dar la pica se debe tapar el “pote” con una tabla o chapa para que no caigan trozos de corteza, etc. La altura de la pica es hasta que aparezcan unos 5 mm de madera blanca sin atacar por el ácido.
La pica hasta la tercera entalladura debe hacerse horizontal y a partir de esta altura inclinadas unos 25º o 30º para facilitar el trabajo. Cada pica debe montar algunos mm sobre la anterior para evitar que se formen escaleras en el tronco. Se debe tener cuidado en no salirse de las guías, en no cortar la madera y en tener siempre perfectamente afiladas las alas de la “escoda” o “azuela”. La última pica no se suele estimular.
c) Aplicación del ácido o pasta: Si la estimulación se hace con liquido (ácido sulfúrico disuelto en agua) la concentración del ácido debe estar entre el 30 y el 40 %. Si se hace con pasta tendrán 40% de Ácido sulfúrico, 40 % de caolín y 20 % de Cloruro sódico.
La aplicación del ácido o pasta se realiza con un pulverizador de plástico, que no suele llenarse más de 2/3 partes.


Una vez realizada la pica se aplica el ácido o pasta a esa zona, de tal forma que incida sobre la zona de tratamiento, para estimular la producción de miera.
El número de días que transcurre entre picas (6-7)varía en este sistema ya que transcurren el doble de días que el de Hugues (3-4).

d) Recogida o remasa: Se realiza igual que en el otro sistema. Únicamente varía la herramienta utilizada para la recogida del “barrasco” que en este caso es el “barrasquillo”, que es análogo al “alisador” pero curvado para adaptarse bien a la curva de la entalladura.
Una desventaja que se puede achacar a la resinación activada en que se introducen elementos ácidos en la miera, por lo que es preciso efectuar luego un cuidadoso proceso de lavado.

Texto y fotos: Jose Luis Aceves Galindo